Gerard Piqué es un central de talla mundial. Aunque no aparezca en la lista de los 23 aspirantes al Balón de Oro, el defensa catalán sí figura en los primeros puestos de los rankings de los mejores entrenadores del mundo. A todos les gustaría tenerlo en sus filas porque es el defensa total, el central que es capaz de robar un balón con limpieza y, en la misma jugada, llegar al área rival y marcar un gol. Sólo hay que recordar que el mejor líbero de la historia, Franz Beckenbauer, es admirador confeso de Gerard Piqué, como desveló a MD. Y si el central culé es tan grande es porque, además de sus condiciones físicas innatas, ha ido perfeccionando día a día su técnica y su sentido táctico. Uno de los culpables indirectos de su progresión es el gran Franco Baresi.
Todo tiene su origen en los días en que Gerard daba sus primeros pasos en el Manchester United, al que llegó en 2004 con sólo 17 años. Uno de los técnicos del club inglés le pasó unos vídeos del que fuera capitán del gran Milan de principios de los 90 para que se empapara de la clase de Baresi. Piqué, aplicado él, se puso manos a la obra y los vio de cabo a rabo.
El defensa milanista, uno de los líderes del Milan de Arrigo Sacchi, destacaba por su elegancia, sus dotes de mando, su privilegiada visión para abortar acciones de peligro, su clase para sacar el balón jugado desde atrás y su habilidad para adelantar la línea del fuera de juego de la defensa, uno de los signos de identidad de aquel equipo campeón. Además, era duro cuando tenía que serlo y también era peligroso en ataque, sobre todo irrumpiendo desde atrás y sorprendiendo a la defensa contraria.
Esplendor 'rossonero'
En aquellos vídeos, el defensa 'rossonero' aparecía en su esplendor, mostrando todas las virtudes que le llevaron a ser considerado el mejor zaguero del mundo de la época, a finales de los 80 y principios de los 90. Poco a poco, Piqué fue repasando aquellas imágenes e interiorizando conceptos de juego que hoy aplica con maestría.
Baresi es una leyenda del Milan. Jugó allí toda su carrera, 20 temporadas, y como agradecimiento a su fidelidad el club 'rossonero' retiró el dorsal con el que se hizo un ídolo, el 6. Piqué sólo lleva dos temporadas en el primer equipo del Barça, pero si sigue así también será leyenda
